Si la expresón “dejar volar la imaginación” tuvo sentido alguna vez, tuvo que ser en referencia a Solo los ángeles tienen alas. Y los clásicos del cine se comentan con esta rotundidad o no se comentan en absoluto.
Así comienza mi última columna en The luxury. Y como me he gustado mucho más que el sombrero en el que podrías servir nachos con guacamole de Cary Grant en la película, os lo enlazo aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario