Clases de religión

Reencarnacionistas: Llevaron a la espiritualidad el concepto kleenex aplicado a la existencia física.

Católicismo: Secta que cree que Dios es bueno y perdona todos los pecados con tal de que les pidas perdón a ellos.

Islámicos: La religión con mejores relaciones públicas. Nadie encuentra un motivo lo bastante para meterse con ellos.

Judaísmo: Es al cristianismo lo que Ocean's eleven a su remake. Hay gente en Hollywood que cree que es la buena, pero la que triunfa es la nueva versión.

Budismo: Versión anímica del popular “tuto o muete”. ¿Que reencarnarse es una miedda? ¡Haber cogío muete!

Ateísmo: Denominación elegante para los aguafiestas.

Agnosticismo: Es el Gallardón de la espiritualidad: no cae bien ni a unos ni a otros, pero por algún motivo no deja de ser popular.

Pastafarismo: Religión verdadera porque salió en Internet antes que en ningún sitio. Y ya sabemos que si está en Internet...

Jedi: Religión fanática cuyos seguidores se tragan todos sus textos sagrados por llenos de patrañas e inconsistencias que estén. Han cogido del cristianismo la figura divina encarnada en un señor gordito, con barba y del que nadie entiende por qué hace lo que hace.

Cienciología: Tremendo viral de la religión a la manera del Amo a Laura. Por si acaso, se recomienda no probar los canapés en los bautizos de los hijos de sus adeptos.

Protestantismo: versión Ikea del catolicismo.